martes, 7 de febrero de 2023

EL ULTIMO ROCK DEL 2022

 

“Tengo que desaprender y olvidarme de hacer

lo que ciertas personas hacen por pura ambición”.

Fantoches. Desaprender.

 

Por Javier Hernández El Abuelo

Twitter: @abuelo_11

#TolucaBrava

 

El plan para el último viernes del año: reunión con los amigos, cerveza, música en vivo y una noche endiabladamente fría. La cita era a las ocho de la noche, en algún punto de la colonia Universidad, con un cartel que sonaba bastante agradable, y que conjuntaba experiencia y juventud; la promesa para pasar una velada inolvidable. Empezarìan los Mes 13, seguidos de Pedro Sandoval full band, y para cerrar, Fantoches, quienes poco a poco se han convertido en una de las bandas consentidas de Toluca.

Para mi desgracia, no pude llegar a ver a los Mes 13, se me hizo bien pinche tarde y me los perdí; espero volver a tener la oportunidad de verlos pronto.

Eran las once cuando llegué, se estaban afinando los últimos detalles para que Pedro Sandoval saliera a demostrar el porqué es considerado uno de los artistas independientes más importantes de la capital mexiquense, ya que cuenta con más de veinte años de carrera artística. Acompañado de Panchito Tejeda, Abraham Yacaman y Rafael Figueroa, viejos conocidos de la ciudad, interpretaron temas clásicos para que los asistentes disfrutáramos de todas sus canciones, y hasta se dieron un tiempo para echarse un palomazo con Maribel Cortés, interpretando Volar en tu cielo, que le dio un significado especial a la noche por lo que representan este tipo de colaboraciones para la música alternativa. ¡Duró casi una hora su mítica actuación!

Poco después de la medianoche, subieron al escenario Fantoches, banda que más ruido han estado haciendo en los últimos años, ya que se han dedicado a trabajar para hacer mejor lo que es más importante: tocar, y eso lo ha recibido el público de muy buena manera.

Fue entonces cuando toda la gente entró al lugar y no paró de bailar y cantar cada uno de los grandes clásicos de la banda. Entre las canciones más solicitadas estuvo Amigos del barrio, convertida ya en un himno a la hora de las despedidas y que ha adquirido un significado muy especial para muchas personas. En mi caso, cada vez que la escucho me recuerda las palabras de Bruce Springsteen en su libro autobiográfico Born to run:Mi voz jamás iba a ganar un premio. Mi acompañamiento a la guitarra acústica era rudimentario, lo que me dejaba sólo las canciones. Las canciones iban a tener que ser la bomba. Pensé que en el mundo abundan los buenos guitarristas, muchos de ellos iguales o mejores que yo, pero ¿cuántos grandes autores de canciones había?”. Se rifo Fausto autor de la canción.




 

Resultó muy interesante apreciar la nueva dinámica de retomar eventos que ya se hacían antes, llevados ahora al interior de casas abandonadas, terrenos baldíos y plazas públicas, ya que en muchas ocasiones esto representa la única oportunidad para bandas y músicos independientes de poder actuar ante un público, que es, a fin de cuentas, lo que quieren, pues desgraciadamente cada vez es más difícil encontrar espacios donde llevar a cabo sus tocadas.

¿Qué mueve a las bandas para organizar este tipo de eventos? ¿La juventud? No creo, pues la mayoría de quienes tocaron ya están a punto de sacar cita para el examen de la próstata; ¿las inmensas fortunas que se amasan por vender cerveza tibia? No hubo tanta gente como para que nos imaginemos eso; además, si fuera tan buen negocio, el pinche capitalismo depredador ya nos lo hubiera quitado. En una ciudad tan pequeña, cada vez es más difícil organizar eventos alternativos.

Sería ridículo tratar de analizar a profundidad la escena musical de la ciudad en la crónica de un pequeño concierto de fin de año. Sin embargo, eventos como este podrían convertirse en el detonante para que las bandas continúen organizándolos y que la gente se vaya involucrando poco a poco con la música de la ciudad.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario