GAZAPO

Belafonte Sensacional

Gazapo

Discos cuchillo

2014

De la violencia policiaca, aunada a mi sentimiento de inferioridad,

son el sueño, son el sueño de la ciudad.

“Sueños de la ciudad”. El Haragán y compañía.

Viví mí tiempo como viven los rebeldes,

enojado pero alegre, tanta furia, tanto amor.

“Canción de los rebeldes muertos”. Puerquerama.

Por Javier Hernández “El Abuelo”

Twitter @abuelo_1176

Gazapo es el nombre de la primera novela de Gustavo Sainz, publicada en 1965, de la que Israel Ramírez, líder de la agrupación chilanga Belafonte Sensacional, retoma el nombre para titular el disco, y su primer material de larga duración, publicado en 2014.

Esta banda inició formalmente como tal en 2009. Al año siguiente, puso en el mercado el EP Petit Riot.

Belafonte recurre a diversos géneros musicales como herramientas para sus canciones. La base de cada una de ellas son las letras, a las que añaden el ritmo y los sonidos más adecuados y que la misma canción les exige. Los temas son variados: amor, desamor, sexo, religión, viajes y la vida misma, teniendo como escenario la caótica Ciudad de México, que te puede abrazar o devorar, según las circunstancias:

Vamos a casa, el sol desapareció, tú te acuestas, yo te miro sin temor, me debilito y nos besamos fuerte el corazón. Yo me limito a estar afuera, suspendido en la ciudad, entre los ruidos y el espacio, en mi polaroid. “Gazapo”.

Afuera esta que llueve, la noche se detiene, una ambulancia aúlla, una vela me alumbra, aquí todo es tan frágil, nos guarda la locura, qué oscura está la luna, no alcanza para el resplandor.  “Afuera está que llueve”.

Sus influencias van desde The Clash y los Talking Heads, pasando por Jaime López y Chava Flores, hasta llegar a la Sonora Matancera. Lo primero que le dije a Belafonte es que nosotros éramos todo lo que hay entre Belle y Sebastian y Joan Sebastián, comentó el bajista, Israel Pompa-Alcalá. El sentido del humor viene incluido de manera natural.

Esta grabación nos demuestra que la rebeldía no siempre se da a ritmo de punk, también se puede manifestar por medio del pop o de la cumbia. Si algo se ha convertido en seña identitaria del grupo es que no temen reinventarse. Uno de sus principales mensajes, contenido en las canciones, es desatarse de las cadenas mentales y no estar sujeto a un género musical concreto, pues la música sirve para construir puentes, y, desgraciadamente, estamos construyendo muros. Existe demasiada violencia en nuestro país como para que la música también se use para atacarnos entre nosotros.

Cronista, juglar moderno, rupestre o urbano, como se le quiera etiquetar, el proyecto ya tiene una identidad clara: que las bandas sepan bien lo que quieren decir, cosa que resulta muy difícil en la actualidad. Esta es la razón por la que les sucede lo que a muchas otras grandes bandas: no encajan en el mainstream; suenan muy ñeros para los fresas y muy fresas para lo ñeros; pero eso con el trabajo y el tiempo será superado.

Lo importante para quienes no los conozcan es “entrarle” a algo diferente, sin buscar descubrir el hilo negro de la música, pero visto desde ángulos nunca imaginados.

¡Gran disco; indispensable para los amantes de la música!